Todos pueden abrir los ojos llegado el momento en el que se den cuenta que hay que abrir unos parpados.
Tenemos la fuerza para abrirlos por muy costoso que sea, y muchas veces nos engañamos a nosotros mismos cuando nos decimos que vemos algo, algo que nos impide ver lo bonito de la realidad.
ABRAMOS LOS OJOS AL MUNDO